lunes, 18 de abril de 2011

" Dicen que todo lo que nosotros estamos  buscando, también nos busca a nosotros y que si nos quedamos quietos también nos encontrará...es por eso que llegué a Sabines o tal vez ël me encontró... primero.
A veces los Poemas cuando ya fueron escritos quedan enredados entre el limbo, un cajón y mis pensamientos...y Acá estoy  leyéndote... Cuando toda evidencia dice que ya te curaste de mí y yo comienzo a intentar a Curarme de tí... Con Sabines" 

Leyendo y encontrándome de frente con Sabine le pregunto
¿Existe un tiempo para amar o dejar de amar, para vivir o morir?  ¿ Se puede reducir a una semana o dias aquello que durante mucho mas tiempo compartimos con el otro?
¿ Cuanto dura el  tiempo que se vive, enfrentado a una eternidad del no querer existir sin el otro?


¿De que sirve el  Lenguaje cotidiano llenos de silencios, mis silencios cuando son los recuerdos los vagan en mis rincones, cuando los diálogos e intenciones dibujadas y desdibujadas se encuentran en un espacio infinito que existe en mi mente y vuelvo a callar lo que quiero comunicar...?


En mi mente El poeta Responde, diciéndome que la poesía irrumpe y ocurre diariamente a solas, cuando el corazón se pone a pensar en la vida..
es entonces cuando comprendo que el poeta es un aspirante a santo, es un hombre vendido a su vanidad.
El poeta se sirve del hombre y sus lamentos, como el amante de su mujer, para decir palabras  cotidianas, repetidas a cuanta amante se encuentra en el camino...

He aquí el poema que me estremeció y dejó fluir en silencio palabras cotidianas...
ESPERO CURARME DE TÍ ( J. SABINES)

Espero curarme de ti en unos días. Debo dejar de fumarte, de beberte, de pensarte. Es posible. Siguiendo las prescripciones de la moral en turno. Me receto tiempo, abstinencia, soledad.
¿Te parece bien que te quiera nada más una semana? No es mucho, ni es poco, es bastante. En una semana se puede reunir todas las palabras de amor que se han pronunciado sobre la tierra y se les puede prender fuego. Te voy a calentar con esa hoguera del amor quemado. Y también el silencio. Porque las mejores palabras del amor están entre dos gentes que no se dicen nada.
Hay que quemar también ese otro lenguaje lateral y subversivo del que ama.
(Tú sabes cómo te digo que te quiero cuando digo: «qué calor hace», «dame agua», «¿sabes manejar?», «se hizo de noche»… Entre las gentes, a un lado de tus gentes y las mías, te he dicho «ya es tarde», y tú sabías que decía «te quiero»).
Una semana más para reunir todo el amor del tiempo. Para dártelo. Para que hagas con él lo que quieras: guardarlo, acariciarlo, tirarlo a la basura. No sirve, es cierto. Sólo quiero una semana para entender las cosas. Porque esto es muy parecido a estar saliendo de un manicomio para entrar a un panteón.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Vaya.. Sra. del Toboso que mas se puede decir sin utilizar un lenguaje cotidiano...y solo usar aquel que el corazón de ambos en silencio se reconocen, se sienten a cada latido, aquel lenguaje que aún estando separados pueden navegar hasta encontrarse nuevamente..
Maravilloso Poema
gracias
No te busque tu me encontraste con este poema