"No perdono la muerte enamorada,
no perdono a la vida desatenta,
no perdono a la tierra ni a la nada". (Miguel Hernandez)
Llegaste a visitarme
en una noche que terminaba por asesinarme
de pena, de llanto, de ausencia
tocaste dulcemente mi mano,
acariciaste mi rostro
y te quedaste mirándome a los ojos.
En tu caricia habia tanta ternura
no dijiste nada,
solo me miraste
y calmaste mis ganas...
Te marchaste en silencio
mientras mis ojos
cerraban los sueños
de llanto, de espanto
de una noche asesina,
de la noche de mi vida
Al marcharte
me dejaste la vida
de compañia
sabiendo que aún no es hora
y me pregunto
¿Cuando volverás?
¿Cuando volverás?
Si, es cierto
muchas veces te he llamado
y he ansiado tu compañia
sé que siempre estarás
allá.. no se donde...
se que un día vendrás por mí
y me iré contigo
y vuelvo apreguntarte
¿cuando volverás ?
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